20th February 2014 Havana, Cuba
¡Un viaje musical desde el Reino Unido a Cuba y de vuelta nuevamente!
Muchas gracias a la cantante británica Holly Holden por este blog sobre cómo hacer música en Cuba y como un encuentro fortuito en la Habana la llevó a participar en renombrados festivales europeos con el pionero del dub-step, el DJ Mala.
Cuando tenía trece años mi madre me llevó a ver el documental Buena Vista Social Club. Recuerdo que me fui del cine en silencio – muda de asombro por los sonidos, las sonrisas, el color y abrumada por la sensación de que ese mundo mágico era en el que yo debía estar.
Me tomó tiempo llegar allí, doce años para ser precisa. Durante ese tiempo aprendí español y a bailar salsa. Leí libros, escuché música y memoricé viejas canciones de la vieja trova que canté en clubes de jazz en Berlín y en fiestas de cumpleaños en Ecuador. También estuve un año en la Universidad de Londres estudiando historia moderna, política y cultura de América Latina y del Caribe. Finalmente en el verano del 2011, recibí fondos para viajar a Cuba con el objetivo de investigar para mi disertación de maestría sobre el fenomenal género de la danza popular reggaeton y las maneras en las que surgió, se refractó y en algunas ocasiones incluso contradijo las ideas convencionales sobre la raza en la isla.
Las dos semanas y media que pasé en Santiago de Cuba me hicieron volar. ¡Nunca había estado en un lugar tan ruidoso! La música estaba por doquier – bachata en la guagua, trova en el centro de la ciudad, reggae en el barrio. Podía estar caminando por la calle con un grupo de nuevos amigos y ellos espontáneamente comenzaban a cantar una canción, algunos tocando clave, otros cantando en harmonía con el coro. ¡Estaba en el paraíso! A pesar de estar allí para realizar una investigación académica, como cantante era imposible para mí estar en Cuba sin hacer música, y terminé en un estudio de grabación con Alain Garcia (Alayo Style) – rapero, poeta urbano y director del trio de hip hop TNT la Rezistencia – que me ha ayudado a guiarme por el escenario de la música urbana de Santiago.
Regresé a Cuba un mes después de graduarme para escribir y grabar un álbum con Alain. Para mí era imperativo evitar la dinámica que caracteriza a tantas colaboraciones cubanas internacionales en las que el elemento cubano es exotizado, erotizado y explotado. También quería evitar estereotipos perpetuos sobre la isla como tierra atascada en un tiempo nostálgico prerevolucionario, una percepción común en el extranjero que puede ser limitante para los músicos ya que eso los restringe a tocar lo que las audiencias extranjeras consideran como ‘auténticamente’ cubano.
Decidimos que la manera más efectiva de distanciarnos de estos rasgos problemáticos era el no hacer referencia específica a Cuba en nuestro nombre o en el contenido de nuestro material al referenciar una gran variedad de géneros musicales, particularmente aquellos que no son considerados ‘auténticamente’ cubanos y al escribir canciones bilingües que abordaran temas universales. Le llamamos a nuestra colaboración X Planet – una utopía imaginaria en la que las fronteras de género se encuentran difusas y en las que las personas y las ideas se mueven sin restricción.
Con el álbum grabado fuimos invitados a participar en la Semana Británica – un evento organizado por la Embajada Británica para celebrar las relaciones históricas y contemporáneas anglocubanas. Fue un honor actuar en el prestigioso Teatro del Museo de Bellas Artes. Todo el grupo estaba encantado cuando íbamos a la fiesta de clausura. En esa misma fiesta fui presentada a varios artistas involucrados en la Semana Británica incluyendo a Mala – productor de South-London y figura pionera en la escena dub step, que había acabado de grabar un álbum en la Habana featuring a varios artistas vinculados con el proyecto Havana Cultura de Gilles Peterson incluyendo a Roberto Fonseca y Danay Suárez. Compartimos algunas historias cubanas e intercambiamos direcciones de correos y nos despedimos en direcciones diferentes.
Meses más tarde, después de lanzar su álbum Mala en Cuba resultó que a Mala le faltaba un cantante para interpretar la balada hipnótica Noches Sueños en su gira. Después de una audición acústica en un estudio de ensayos en Croydon fui acogida en la familia de Mala en Cuba y me pasé el verano compartiendo con un grupo increíble de personas, cantándole al público en festivales de Europa. ¡Fue una experiencia inolvidable y todo gracias a la presentación de la Embajada Británica!
Me pasé el mes de enero en Cuba, reconectándome con viejos amigos y reviviendo a X Planet. Durante mi visita llenamos por completo el lugar más caliente de música en vivo de Santiago de Cuba, el nuevo Club de Jazz de Iris. Fue la primera vez que X Planet actuó en la isla desde nuestro espectáculo en la Habana como parte de la Semana Británica y fue fantástico ver al público cantar con nosotros.
Estoy ahora de regreso en Londres y espero volver a Cuba este verano con el objetivo de organizar un pequeño festival, que celebrará a Santiago de Cuba como el semillero de la creatividad cubana, por medio de intercambios en paneles, de conciertos y exposiciones.
¡Reserven un espacio!
Para más información consulte el blog de X Planet
hola mi nombre es Mirta Osorio, solo tengo una pregunta ,no entiendo como es que no le dan oportunidad a talentos jovenes nuevos ,siempre son los mismos en Puerto Rico tenemos a Galante el Emperador ,joven talentoso que compone su propia musica Urbana y como a muchos mas no le dan la oportunidad de crecer en la musica siempre le dan la oportunidad a los mismos y los nuevos talentos nada que ver me gustaria ver a un baliente que de el promer.paso y si me gustaria que publicaran lo aqui esctito