Un registro más, qué importa…The second blog from Rina Paredes from Peru
Finalmente instalada en Londres, hoy cumplo una semana en esta ciudad que nunca se cansará de sorprenderme. Luego de pasar dos semanas al norte, rodeada solo de angloparlantes, esta semana me instalé en la ciudad más cosmopolita del mundo y conocí mi casa de estudios por el siguiente año. Gente de 150 países, es lo que nos dice la última encuesta sobre la población estudiantil en LSE. 150 países representados, la biblioteca de ciencias sociales más grande del mundo, el primer sistema de tren subterráneo del mundo, más de 100 salas de teatro solo en la ciudad, todo esto entre mil atractivos turísticos más que aún no recorro porque llegué justo para la semana de registro y para inaugurar el nuevo sistema de LSE. Esta última innovación ha hecho que los estudiantes nuevos nos volvamos cercanos y solidarios casi inmediatamente porque la gran mayoría anda dubitativo por los pasajes de LSE preguntándose si es que el famoso “timetable” y el registro de cursos cuadrará para los cursos que queremos llevar.
Entre tanta confusión y mil preguntas, escuchas consejos en distintos acentos de inglés y varios otros idiomas y claro, cuando ves a gente abrazándose (como cuando me encontré por primera vez con mi compañera becaria Chevening) ¡no hay duda que encontraste gente de América Latina! Muy sorprendida por la composición de mi clase de Política Social y Desarrollo descubro que 15 de 40 estudiantes venimos justamente de esa región (y somos dos becarias Chevening en esa misma clase: Venezuela y Perú) gente muy joven pero con mucha experiencia en organizaciones internacionales de desarrollo. Definitivamente será tiempo de compartir y aprender.
Y entre registro y registro sigo conociendo gente variada: dos Chevening más registrándose en la policía conmigo (nota importante para los futuros becarios: asegúrense de coordinar esto con la universidad a la que postulan); mis simpáticos “flatmates”: Irlanda, China, EEUU, Rusia e India con quienes ya planeamos (y nos registramos) para una noche de pisco sour; una colombiana con quien, luego de registrarnos y postular, fuimos elegidas para ser las encargadas de conducir campañas por el cuidado del ambiente en nuestra residencia, y así, mientras continúan los registros, intercambiamos nuevas formas de aprender a vivir/sobrevivir en esta ciudad. Sí, Londres es indudablemente una ciudad maravillosa de conocer, ahora es tiempo de convivir con ella, apreciarla y aprender lo mejor de ella.