Catherinne de la Torre is studying an MSC in PUBLIC POLICY AND ADMINISTRATION at the London School of Economics & Political Science. Catherinne is from Peru and like our other Chevening blogger from Peru, will regularly appear on these pages.
El objetivo de este blog es contarles, de manera informal, las experiencias de asimilación a Inglaterra, así como las vicisitudes de la vida académica durante setiembre del 2010 a setiembre del 2011. El blog, será un registro de estas experiencias y todo lo que sea escrito en él es de mi autoría y responsabilidad.
El 09 de setiembre llegamos a Londres a las 10:30pm de la noche al aeropuerto de Heathrow, luego de un vuelo de 6 horas de Newark, Nueva York. Nuestra llegada, coincidió como con 10 otros vuelos. Así es, como comprenderán la cola de migraciones fue eterna. Tomo hora y media hasta que nos atendieran, y la revisión de los pasaportes tomo breves minutos. Paciencia cuando estén en esa situación, es inevitable, es el aeropuerto de Heathrow, el más transitado!
Al día siguiente, lo primero que hicimos , fue comprar nuestra “oyster”. Esta es la tarjeta que te permite transportarte en los trenes y buses públicos . Si bien uno puede caminar a todos lados, es importantísimo contar con esta tarjeta. Una vez, que teníamos la tarjeta, procedimos a tomar el bus para que nos llevara a una casa de cambio a cambiar dólares a libras esterlinas. Es en este momento que tuve mi primer choque cultural. No sé si fue causado por el cansancio, o por costumbre, pero al cruzar la calle no vi si venían carros por el lado izquierdo. Aquí muchas cosas son a la izquierda: las puertas se abren por el lado izquierdo, el agua fría está al lado izquierdo, cuando suben escaleras del tren tienen que hacerlo por la izquierda dado que las que bajan a la estación lo hacen por la derecha, etc.
El segundo choque cultural y al cual continuo adaptándome, es la cantidad de gente por metro cuadrado que hay en la ciudad de Londres. Es impresionante el número de personas y todas están corriendo. Para uno puede resultar un ambiente un tanto hostil, es como si todos estuvieran corriendo para salvar su vida, claro exagerando, pero así es de rápido. Es una ciudad que no te da tiempo de ser absorbido, simplemente se impone. Pero luego de unos días, entendí que es así, hay tanta gente y los recursos con los que disponen para transportarse son limitados, así que el que primero llega gana. Esa es una apreciación del comportamiento colectivo de la ciudad; sin embargo, cuando uno trata directamente con las personas, debo decir que los londinenses (nacionales o extranjeros) son muy amables y te ayudaran en lo que puedan. Ojo toma tiempo acostumbrarse a todos los acentos, y bueno ellos también se toman su tiempo en adaptarse al tuyo.
1.Hablo en plural porque mi esposo me acompañó para todo el proceso de instalación en Londres.
2.Un mapa de la ciudad, del sistema de trenes o un GPS harán que movilizarte en Londres sea más fácil.
3.Por ningún motivo recomiendo cambiar dólares en el aeropuerto, a menos que tengan que pagar un taxi y no tengan otra opcion, y tampoco en bancos; el mejor precio que pueden conseguir es en una casa de cambio. La que nos acomodo más a nosotros fue en London Bridge.
Esta ciudad es tan maravillosa y ofrece tanto que es imposible hacerlo todo. Mejor es tomárselo con calma y hacerlo de a pocos. Mis favoritos por el momento son: Buckingham Palace, Westminster Abbey, London Eye, Big Ben y el Parlamento, y la Catedral de San Pablo. Pero hay muchísimo más por visitar.
En estos días también me contacte con la contraparte del British Council quien me facilitó con una tarjeta de debito para ayudarme en el proceso de instalación. Esta tarjeta está considerada en la beca.
Finalmente, en una de las tantas caminatas fuimos a LSE para ver la universidad en vivo y directo. Esta visita me permitió tener una mejor sensación del lugar donde estaré estudiando el próximo año y la verdad que me emocionó muchísimo. Creo que fue el momento clave de estos días, todo el trabajo y el esfuerzo se materializo. Sentí un gran orgullo y gratitud por esta oportunidad; y una gran responsabilidad de destacarme en una universidad tan competitiva como esta.