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Tim Cole

Former British Ambassador to Cuba

29th December 2014 Havana, Cuba

Envejecimiento de la población de Cuba – lecciones de todo el mundo

El envejecimiento de la población en Cuba es ampliamente reconocido como un problema serio. Marino Murillo ahora Ministro de Economía lo ha descrito como un ‘reto colosal para la nación’. Los hechos concretos son: en el 2021 las personas que dejarán de ser parte de la fuerza de trabajo superarán en número a las que ingresen a la misma y en el 2026 la cifra de fallecimientos será mayor que la de nacimientos. La población mayor de 60 años en el país aumentará de 2 millones en el 2012 (18.3% de la población) a 3.5 millones en el 2050 (36%). Por lo tanto habrá más abuelos y abuelas cubanas; ¿cuál es el problema?

Hay varios. Una población envejecida significa normalmente que existirán más pensionados y menos personas en capacidad de trabajar. Los gobiernos necesitan gastar más en salud pública, en pensiones, en transporte público y en asilos pero menos en educación y en círculos infantiles. También significa menos ingresos por concepto de impuestos sobre todo provenientes de los impuestos sobre los ingresos personales ya que menos personas trabajan. En términos económicos, una población envejecida normalmente significa que una proporción más pequeña de la población del país está contribuyendo al crecimiento económico.

Cuba no es la única que se enfrenta a este problema. Países de Europa tales como el Reino Unido, España e Italia se enfrentan a situaciones similares. Japón y Singapur también. Los BRICS están igualmente afectados; en China, las políticas para controlar el crecimiento de la población han llevado a un envejecimiento de la misma y al fenómeno 4-2-1 en el que los hijos únicos llegan a la edad laboral y tienen que cuidar de sus padres y de cuatro abuelos en retiro.

¿Por qué ocurre esto? Una mejor salud pública significa que las personas viven más. Y que más mujeres trabajen y tengan hijos más tarde. En Cuba las mujeres pueden llegar a vivir hasta los 81 y los hombres hasta los 77. Alrededor del 38% de las mujeres cubanas trabajan. Pero otros temas también afectan la tasa de natalidad. Por ejemplo, en la mayoría de las ciudades cubanas, muchas generaciones de una familia comparten una casa o apartamento con espacio limitado para los nietos o los niños. Y un alto nivel de emigración, particularmente de los jóvenes significa que la población de Cuba está envejeciendo más rápidamente.

¿Por tanto qué puede hacerse al respecto? ¿Qué puede hacer el gobierno para asegurarse de que la economía es tan saludable como su población? ¿Qué se ha intentado o probado en otros países?

Elevar la edad del retiro es una idea. Esto mantiene a más personas trabajando y a menos retirando pensiones. En el Reino Unido por ejemplo, no hay edad de retiro. Las personas pueden retirarse cuando lo deseen y la edad en la que los ancianos reciben su pensión estatal pronto se elevará a los 67 años. Cuba ha incrementado su edad de retiro. Los hombres se reitan ahora a los 65 y las mujeres a los 60, cinco años más tarde de lo que solían hacerlo. ¿Deberían los gobiernos hacer más? Un enfoque radical podría ser vincular la edad de retiro con la esperanza de vida. De manera alternativa, los gobiernos pueden promover un trabajo más flexible para paermitirle a los retirados que tienen mucho para ofrecer pero que quizá no deseen laborar a tiempo completo, continuar trabajando.

En muchos países en diferentes estadíos de su historia económica – los Estados Unidos, Japón, China, Reino Unido – la productividad se ha incrementado. Si la actual población laboral produce más, la economía crece y es más capaz de sostener a los pensionados del país. Pero eso es más fácil decirlo que hacerlo. Para lograrlo se necesita de inversión de capitales, importar tecnologías y entrenar su fuerza de trabajo. El reciente impulso de Cuba hacia la inversion extranjera si resultara exitoso, podría parcialmente contribuir a ello. Un ambiente de negocios favorable al empresariado y a la toma de riesgos que promueva la creatividad cubana y el dinamismo y facilite las buenas decisiones comerciales sería de gran ayuda. También lo haría un trabajo más flexible y más interesante y puestos bien remunerados para mantener a las personas en la fuerza laboral e incentivar una mayor productividad.

¿Una solución podría ser promover el envoi de más remesas? Las remesas son probablemente la mayor fuente de crecimiento en la economía cubana en estos momentos con hasta $ 3000 millones al año transferidos desde Estados Unidos. Más debe provenir de las comunidades cubanas en otros países tales como España, Canadá y Venezuela. El dinero es invertido en pequeños negocios, cubre el trabajo de DIY en casas privadas y ayuda a las personas a desenvolverse económicamente. $ 3000 millones no es realmente mucho; otros países reciben mucho más. Por ejemplo, Vietnam recibe $ 11mil millones cada año, México obtiene $ 22 mil millones y la India recibe una impresionante cifra de $ 70 mil millones. Cuba recibe el equivalente de aproximadamente 5% de su economía total; en Tajikistan ello representa el 52%.

¿O se podría estimular a las personas a que tuvieran más hijos? Esta es una tarea ardua y algo con lo que los gobiernos de todo el mundo están lidiando. En Rusia, las mujeres reciben pago en efectivo si tienen un segundo hijo. El gobierno francés ha introducido medidas para estimular a las parejas a que tengan tres hijos y en el Reino Unido hemos tratado de ofrecer mejor cuidado a los niños para que los padres puedan continuar trabajando. Permitirle a los padres que tomen más licencia de maternidad o paternidad como es el caso de Singapur es algo que pudiera funcionar. En Cuba, la vivienda es clave. Aquí, muchas generaciones de una misma familia viven bajo el mismo techo. Ello puede tener ventajas tales como un cuidado fácilmente disponible del niño pero puede siginificar que no hay suficiente espacio en la casa o en el apartamento para que la familia crezca.

De manera alternativa, ¿existe alguna forma de estimular a las personas a que no emigren? Esto es crucial. Ofrecer el ambiente adecuado y las oportunidades a los jóvenes, por ejemplo educación, puestos interesantes, entretenimiento, acceso a internet, los mantiene más en la casa. Pero cómo lograrlo en medio de la competencia que representan otros países es difícil. Al menos, si deciden emigrar, es posible que envíen remesas a su país natal. Pero si se quedan y trabajan en puestos productivos, aportan su creatividad, imaginación y comprensión de las nuevas tecnologías a los viejos problemas y ayudan al país a desarrollarse.

Finalmente ¿Cómo sería si se incrementara la inmigración? Al venir de Londres que cuenta con una muy diversa población, una de las cosas que más llaman la atención de Cuba es la ausencia de grandes poblaciones de inmigrantes. Por supuesto, han existido olas de inmigración en el pasado – los españoles, los esclavos africanos, emigrants de las Antillas Occidentales, los chinos, pero no más. Los inmigrantes aportan nuevas ideas y a menudo trabajan arduamente para odrecerle a sus familias un buen comienzo en su nuevo país. Canadá tiene una muy alta tasa de inmigración per capita – alrededor de 250 000 personas al año se asientan allí. En Suiza, un cuarto de su población nació fuera del país.

Estas son solo unas pocas ideas. Ustedes tendrán las suyas. Pero tal y como reportó Cubadebate después de una reciente reunion del Consejo de Ministros, este es uno de los mayores retos enfrentados por Cuba con un impacto en su economía, en su vida social y familiar. Es un problema que muchos otros países han confrontado también y la solución nunca ha sido fácil de encontrar.

Acerca de Tim Cole

Hi! I’m Tim Cole, the British Ambassador to Cuba. I arrived in Havana in August 2012 and presented my credentials as British Ambassador the following month. I’ve been a diplomat…

Hi! I’m Tim Cole, the British Ambassador to Cuba. I arrived in Havana in August 2012 and presented my credentials as British Ambassador the following month. I’ve been a diplomat since 2001; before Cuba, I spent 5 years in London where I worked on Pan-African policy and global economic issues and 6 years in southern Africa as Deputy Head of Mission in Mozambique and Zimbabwe. Most of my career has been in Africa as before joining the FCO I ran humanitarian aid programmes in Central Africa for the British NGOs Christian Aid and Save the Children. I’m married to Clare and we have 2 children – Jonathan and Zea.

The idea of this blog is to tell you what the British government is doing in Cuba and why. If you enjoy the blog and want to read more, please follow me on Twitter.