Site icon Foreign, Commonwealth & Development Office Blogs

¿Puede internet estimular el crecimiento económico en Cuba?

Uno de los visitantes más inusuales en la Habana durante la semana pasada fue quizá Eric Schmidt, el Presidente de Google. Su visita coincidió con las noticias de que la economía cubana está creciendo más lentamente que lo esperado – a solo 0.6% en los primeros seis meses del 2014, con la puesta en marcha de la nueva ley para la inversión extranjera y la fase de knock-out de la Copa Mundial. ¿Cuál es vínculo entre todo esto y la visita del Sr. Schmidt? La necesidad de un mejor acceso a internet en Cuba.

Mucho se ha escrito sobre como internet contribuye al crecimiento económico. Un informe del Mckinsey Global Institute del 2011 mostró que internet representaba 3.4% del PIB de las mayores economías del mundo, que había contribuido a más de 10% del crecimiento total del PIB en los cinco años precedentes en China, India y Brasil y que su contribución total al PIB global fue mayor que el de toda la economía de Canadá. A medida que el acceso a internet, la infraestructura y el uso de internet se incrementan, las empresas se benefician al poder operar más eficientemente, los servicios públicos son realizados con mayor eficacia y los clientes pueden comprar bienes y servicios a precios más económicos.

Puede parecer un largo camino en Cuba pero los beneficios serían tangibles para empresas estatales, cuentapropistas, cooperativas y para todos los demás. Imaginen un escenario en el que la cooperativa de un campesino en Mayabeque quiera vender sus piñas y no pueda fácilmente encontrar un comprador pero a dos horas de allí en la carretera hacia Varadero se encuentra un hotel que necesita algunas. ¿Cuál es la mejor manera de que ellos puedan reunirse? Por internet, por supuesto. En la actualidad, internet ofrece el mejor mercado para compradores y vendedores. Ello ha sido probado por el increíble éxito de sitios tales como ebay y revolico en los que las personas venden y compran objetos nuevos y de uso. Imaginen también que son capaces de pagar su cuenta de ETECSA en línea y no tener que hacer cola o que les entreguen a domicilio sus compras de la semana. En países con un buen servicio de internet ambas opciones son una práctica normal. He estado utilizando el servicio de banco electrónico durante casi 12 años y he estado pagando mis facturas en línea. Es más fácil para mí y para las compañías que reciben mi dinero.

Si usted está sentado en su sillón en Viñales, eso puede parecer aún irreal, pero ¿qué hay de ser capaz de enviar dinero via SMS por su teléfono móbil a un primo en Santiago? Muchos millones de kenianos lo han estado haciendo durante años, aunque presumo que sus primos viven fuera de Santiago. Una impresionante cifra de $24 millones por día (sí, por día) es transferida a diferentes puntos de Kenya por medio del sistema M-pesa. Imaginen cuantos primos felices.

Pero no solo los cubanos se beneficiarían con un mejor acceso a internet. Los inversionistas extranjeros también. La nueva ley cubana de inversión extranjera tiene previsto atraer más compañías extranjeras para que se establezcan en Cuba. Pero todos necesitarán buenas y veloces conexiones de internet para ser capaces de transferir documentos y datos a sus oficinas centrales o a sus clientes fuera de Cuba. Y sus empleados extranjeros, acostumbrados a acceder fácilmente a Facebook, a Twitter y a YouTube en sus países se sentirán frustrados si no pueden acceder rápidamente al servicio en línea desde aquí.

Y finalmente la Copa Mundial. Más que cualquier otro evento que haya visto aquí, la Copa Mundial ha iluminado a Cuba. Todo el mundo habla de ello, todo el mundo tiene una opinión, todo el mundo tiene un equipo favorito (a pesar de mis esfuerzos me da pena decir que pocas veces es Inglaterra). En las últimas semanas la sed de conocimientos, de hechos y de comprensión del fútbol y de la Copa Mundial – su historia y sus anécdotas – ha sido impresionante. Y ahí es donde aparece internet. Con una tableta, un teléfono celular, una laptop o un escritorio cualquiera puede acceder en línea y aprender más, intercambiar opiniones con amigos fuera del país, comentar en foros en línea, enviar tweets a sus jugadores favoritos. Este hecho de compartir depende de la experiencia y refuerza el conocimiento. Enriquece aquellas conversaciones en la barbería o en la mesa de dominó.

No sé exactamente que dijo el Sr. Schmidt cuando visitó Cuba la semana pasada. Desafortunadamente no tuve la oportunidad de verle. Probablemente no habló de piñas, revolico, dominó o primos en Kenya. Pero estoy seguro de que fundamentó la necesidad de tener más internet en Cuba. Como espero yo tenga. Agradezco sus comentarios a continuación.

Exit mobile version