Tres años en Paraguay

Mientras el avión tocaba tierra en Asunción el 3 de enero de 2013, repasé en mi mente unas palabras que preparé sobre la reapertura de la Embajada Británica en Paraguay luego de 8 años de ausencia. En aquella ocasión no hubo prensa, así que nos abrimos camino a la primera “Embajada”: la habitación 109 del Hotel La Misión, la cual sería nuestro hogar y mi oficina por los próximos meses.

Como en cada proyecto, uno tiene que enfocar su atención sobre los puntos más urgentes. Lo primero en mi lista fue la necesidad de encontrar una oficina, sin la cual no podíamos abrir una cuenta bancaria; contratar el personal ni registrar la Embajada formalmente con el Ministerio de Relaciones Exteriores. La principal razón de la re-apertura fue el despegue de la economía paraguaya. Por un lado, esto se traduce en muy buenas noticias pero también en una gran demanda por oficinas. Tuvimos buenas opciones pero nos ganaron de antemano en dos ocasiones, entonces al momento de llegar comencé nuevamente la búsqueda. Finalmente, logramos cerrar un acuerdo asegurando nuestras nuevas oficinas. Esto también significaba la contratación de nuestra primera oficial local. Además, con el apoyo de una talentosa oficial de Londres, finalmente teníamos un equipo en tierra. Todavía faltaba todo por hacer y por un tiempo adoptamos como himno la canción de Seasick Steve (un cantante de blues que fue descubierto cuando era un vagabundo en las calles de EEUU) “I started out with nothing, and I’ve still got most of it left”. Mientras tanto, continuamos trabajando.

Necesitábamos buenas personas para integrar el equipo. Todos debían aprender de cero, y los empleados más antiguos debían pasar el conocimiento que habían adquirido en el proceso. Durante el siguiente año, el equipo de la Embajada debió pasar gran parte de su tiempo  viajando para asistir a cursos de entrenamiento, tutorías y capacitaciones regionales a fin de ganar experiencia y apoyo. Trabajar en una Embajada pequeña, significa regularmente cubrir a colegas en temas que todavía no conoces bien. Todos se esforzaron y llevaron el desafío adelante – no había otra alternativa, ya que todavía teníamos que continuar con el proyecto de montar la Embajada durante este primer año.  En julio llegó el Embajador Jeremy Hobbs, justo a tiempo para la asunción del nuevo Presidente de Paraguay. En el octubre de 2013, tuvimos la visita del Ministro Swire. Fue la manera perfecta de concluir esta primera etapa del proyecto y pasar a la siguiente fase. El Ministro se comprometió ser el anfitrión de un evento de inversiones en Londres denominado “Invertir en Paraguay” en noviembre de 2014, abriendo así las puertas para incrementar las relaciones bilaterales en el sector comercial. También intenté aumentar mis chances de ser el nuevo Bond con este video sobre la reapertura de la Embajada.

Todo el segundo año fue para promover la educación, las relaciones comerciales y de seguridad. Un record histórico de 6 Ministros paraguayos participaron del evento “Invertir en Paraguay”, así como 200 empresarios; nuestro programa de becas Chevening se expandió de 1 a 4 becarios y luego a 12 en los dos últimos años. En el 2015 nos enfocamos también en los derechos humanos, trabajando de cerca con Paraguay, que desde enero de 2015 es miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU; expandimos nuestra cooperación en defensa ofreciendo cursos de liderazgo estratégico y otras capacitaciones a una nación que contribuye con soldados a Misiones de Mantenimiento de Paz; y organizamos una exitosa feria de universidades con 15 universidades británicas y más de 1500 participantes en dos jornadas distintas.

Han sido 3 años increíbles en Paraguay, con sus momentos difíciles pero siempre emocionantes. Me siento orgulloso de todo lo que el “Equipo Asunción” ha logrado y a la vez un poco triste de partir cuando todavía hay mucho por hacer. En la vida, no siempre te toca ayudar en la reapertura de una Embajada o formar parte de un equipo ganador. Este equipo se extiende más allá de Asunción: en Londres con ESD, FCOS y el Desk de Paraguay, su apoyo y dedicación han sido extraordinarias y el “Proyecto Paraguay” no habría sido posible sin ellos.

Voy a seguir con mucho interés las noticias sobre Paraguay. Y por cierto Steve “We ain’t got none of it left”.